[...] -Y vos, creo que sos diferente ahora también. Bahía te trajo distinta. Te cambió.
-Distinta como?
-Mas triste, mas callada. Y cuando gritás o te reís fuerte, no sé… se nota que no estás feliz en serio.
-Es cosas como esta… Estar así, tomando mates, y pensar en una canción o un chiste, o algo que pasó hoy. Querer contárselo, compartirlo con él, y no poder. Porque no está. Porque si estuviera, no estaría del todo. Por eso lo extraño triste.
-Sos una boluda.
-Porque nunca hago lo que me dicen, no?
-Eso y porque repetís la historia mil veces.
-No lo parece, pero es una linda historia. [...]
